jueves, 31 de enero de 2019

ETICA 10°


Lectura grados 10° 01 y 02

LOS ACTOS HUMANOS
Definición de acto humano
Son aquellos que proceden de la voluntad deliberada del hombre; es decir, los que realiza con conocimiento y voluntad. En ellos interviene primero el entendimiento (que conoce el objeto) y luego la voluntad (que lo busca o lo rechaza). En estos casos el hombre es dueño y responsable de sus actos. Sólo en los actos humanos puede darse valoración moral.
La categoría singular del hombre, que le distingue y eleva por encima de los otros seres de la creación visible, radica en que está dotado de inteligencia y voluntad, con libertad armonizada con la de sus semejantes, para tomar decisiones. Las expresiones cotidianas racionales del hombre caen en el concepto de acto humano. El pensar y el razonar son actos propios del hombre y están sometidos a una coacción de la voluntad determinada por su conciencia moral. Esta es el tribunal interior que juzga el bien y el mal.

No son actos humanos
Los actos meramente naturales: los que proceden de las potencias vegetativas y sensitivas, sobre las que el hombre no tiene control voluntario alguno, y son comunes a los animales. Por ej. La nutrición, circulación de la sangre, respiración. Los actos del hombre: los que proceden del hombre, pero falta advertencia (locos, niños sin uso de razón) o la voluntariedad (por coacción física, p. ej.) o ambas (el que duerme, p. ej.)
En la experiencia más elemental del ser humano se produce un fenómeno que conviene señalar: sabe que obra bien o que obra mal, que sus acciones son buenas o malas. Lo sabe porque se lo dice la conciencia, esa voz interior que avisa: hay que hacer el bien y evitar el mal. Pero la conciencia no hace más que traducir la convicción previa de que tenemos grabada en lo profundo una ley, a la que debemos someternos; de modo que, si obramos de acuerdo con ella, obramos bien; y si la contradecimos, obramos mal.

Por ser libre, el obrar humano posee una contingencia constitutiva: es concreto, cambiante, circunstancial. Lo que hago puedo no hacerlo, o hacerlo de otro modo. Las circunstancias no determinan totalmente mi actuar, sino que puedo asumirlas más o menos, y de un modo u otro. Por todo ello con mis actos puedo lograrme como persona o malograrme, superarme o degradarme; mis acciones me desvelan o me encubren. En una palabra, son autorreferenciales, es decir, revierten sobre el sujeto modelándolo para bien o para mal.
Otra característica del obrar humano es su singularidad: se construye decisión a decisión, paso a paso, de tal modo que en cada acto se compromete la persona entera; cada acto singular resume toda la vida, y la orienta o no en el horizonte de la vocación. La conciencia moral permite darnos cuenta de los efectos de nuestra conducta y nos inhibe o nos empuja en la realización de nuestros actos bajo una compulsión interna que limita la libertad.
La libertad hace del hombre un sujeto moral. Cuando actúa de manera deliberada, el hombre es responsable de sus actos. Los actos humanos, o sea, los actos libremente realizados tras un juicio de conciencia, son moralmente buenos o malos.
La bondad o maldad de los actos humanos depende de: el objeto elegido, la intención o fin que se busca, y las circunstancias de la acción.
La persona humana se ordena a la bienaventuranza por medio de sus actos deliberados; las pasiones o sentimientos que experimenta pueden disponerle o contribuir a ello, pero en si mismas las pasiones son no buenas ni malas; sólo reciben calificativo moral en la medida en que depende de la razón y de la voluntad.
En el ser humano anida una serie de impulsos, tendencias, afectos y sentimientos que se conocen como pasiones, reconocidas como fuerzas que le ha puesto la naturaleza y que nos mueven a obrar. Esas fuerzas están desordenadas y provocan tensión en el hombre, pero es indudable su utilidad si se logra controlarlas.
El amor y el odio, el deseo y el temor, la alegría, la tristeza y la ira, son las pasiones principales. Las pasiones de por sí no son buenas ni malas, pero lo son en la medida en que dependen de la razón y de la voluntad e impulsan a obrar el bien o el mal. Luego las pasiones son moralmente buenas cuando contribuyen a una acción buena, y son moralmente malas si empujan a obrar el mal. Las pasiones pueden ser asumidas en las virtudes o pervertidas en los vicios.
El hombre es una realidad sustantiva, esto es, un sistema clausurado y total de notas constitucionales psico-orgánicas. Una de ellas es la inteligencia, esto es, la aprehensión de todo y de sí mismo, como realidad. El hombre debe obrar de modo que produzcan deseos armoniosos más bien que discordantes.

Esta inteligencia es formal constitutiva y radical ya que a través de ella aprehende lo real sintiendo su realidad. Gracias a esta inteligencia, el hombre se comporta con todas las cosas reales, y consigo mismo, no sólo por lo que determinadamente son en sí mismas, sino que se comporta con todo por ser real y en cuanto es real: vive de la realidad. Es animal de realidades. En su virtud, el carácter de realidad del hombre es un momento determinante de su acción: el hombre actúa realmente porque es su realidad.
Antes de plantear en que consisten la bondad o la maldad morales, y cómo los actos que la persona ejecuta pueden convertirse en actos buenos ó malos, lo primero que se tiene que analizar es ¿qué clase de actos puede realizar el hombre?, ¿son todas los acciones humanas susceptibles de convertirse en moralmente buenas o malas o solamente algunas de ellas?
La voluntad es la facultad de controlarnos a nosotros mismos, de dominarnos a nosotros mismos, de hacer lo que queremos, en lugar de estar obligados a hacerlo, de modo que, como consecuencia, venimos a ser considerados como responsables de lo que hacemos. Dos cosas principales que impedirían que nuestros actos fueran voluntarios, son la ignorancia y la coacción puesto que el acto voluntario es un acto conscientemente o deliberadamente querido.
Precisamente, el hombre difiere de los animales irracionales en que es dueño de sus actos mediante su razón y voluntad, solamente estos actos de los que el hombre es dueño son los que se designan apropiadamente como humanos, para el estudio de la ética pueden distinguirse dos clases principales de actos que son ejecutados por la persona: los actos humanos y los actos de un hombre.

Actos involuntarios o actos de un hombre, esto es, los que un individuo acontece realizar, pero de los que no es dueño, que no ejecuta conscientemente o quiere deliberadamente, y de los cuales no es tenido por responsable.
Actos voluntarios o actos humanos, esto es, aquellos que el hombre domina, que controla conscientemente y quiere deliberadamente, y de los que es tenido por responsable.
Es importante señalar que los actos humanos, tomados en su conjunto, forman la conducta humana.
Ejemplos de actos involuntarios son los actos realizados durante el sueño, la locura o durante momentos de distracción, estos actos no constituyen conducta humana y no poseen significado ético.
El llevarse alimento a la boca en un estado de distracción de la mente es un acto de unhombre, pero decidirse deliberadamente a comer dicho alimento es un acto humano. Así pues, aunque es imposible tener un acto humano a menos que esté dirigido por el intelecto y la voluntad, el acto mismo así guiado puede ser, con todo, de una u otra clase. En otras palabras, un acto humano puede ser de carácter físico o mental, mientras que éste sea deliberadamente querido o no.
El acto humano es el resultado que la persona humana sabe y quiere. Su capacidad de conocer más allá de lo sensible es tarea del intelecto, y su capacidad de querer lo que sabe de un modo intelectual y por tanto de buscarlo es tarea de la voluntad.
Para que el hombre actúe, ha de empezar por estar atraído por algún bien. Cuando percibe algo como bueno, despierta en él un querer de aquello, y si ve que aquello es no sólo bueno en sí mismo, sino también bueno para él, su querer se convierte en deseo.
Un deseo podrá permanecer sin efecto, pero, si el individuo comprende además lo bueno como susceptible de ser alcanzado, su percepción intelectual mueve su voluntad hacia un acto de intención espontánea o tendencia hacia la cosa buena, esto es, hacia un extenderse para conquistar el objeto.
Como siguiente paso dirige ahora su intelecto hacia la tarea de ponderar las razones en favor y en contra de llevar a cabo su intención y los diversos conjuntos de medios con cuyo auxilio podría ser aquella ejecutada. Este acto del intelecto se designa como deliberación, cuyo resultado es el de llegar a uno de los dos juicios prácticos: "esto debe hacerse aquí y ahora", o "esto no debe hacerse ni aquí ni ahora".

Hasta aquí las condiciones han sido puestas ahora para tomar una decisión, sabe ahora perfectamente lo que debe hacer y las razones de ello, todo está dispuesto ahora para el veredicto, esto es, para el acto supremo de expresión del ser del hombre como una persona de dirección autónoma. Acepta uno u otro de los juicios prácticos alternativos del intelecto mediante una decisión de su voluntad, lo que constituye su acto de compromiso.

El juicio práctico que precede inmediatamente a su decisión y expresa la alternativa escogida es el último juicio práctico. Cada acto de la voluntad es precedido por un acto del intelecto, siendo el más importante de estos la deliberación.

La deliberación consiste en una serie de juicios prácticos en favor y en contra del curso de acción contemplado. El último juicio práctico no es distinto de la deliberación, sino que es simplemente aquel, al que la voluntad consiente aceptándolo.
La parte más importante del proceso es el consentimiento, ya que es a partir de éste el acto es una decisión de la cuál se es responsable, a partir de este momento es un acto humano, un acto voluntario.
Con lo que respecta a los sentimientos y las emociones, ciertamente desempeñan un importante papel en el proceso deliberativo, reforzando las razones en favor o en contra, por tanto intervienen fuertemente en todo acto de decisión; incluso en algunas personas sus vidas se deciden casi por completo en el plano emocional, pero es necesario precisar lo siguiente, el acto humano puede ir acompañado de emociones muy fuertes pero para que sea un acto humano, un acto plenamente voluntario, las emociones han de estar bajo el control de la persona.

Ahora bien, podría parecer que únicamente el acto interno de la voluntad misma sea el acto humano, en el sentido más estricto es así, porque es en la voluntad donde residen la elección y el consentimiento y a partir de estos el acto adquiere su carácter específicamente humano.
La persona sabe a la vez que sabe, y sabe que quiere, en efecto, es la unión de conocimiento y voluntad lo que hace voluntario a un acto, como conclusión la definición del acto humano puede formularse así: definición puede formularse así: acto voluntario es aquel que procede de la voluntad con un conocimiento del fin.
Los actos humanos son los actos libres del hombre. Los actos libres del hombre pueden ser actos moralmente buenos o moralmente malos, pero nunca indiferentes. La bondad o maldad de un acto humano depende del objeto elegido, de la intención o fin que se busca y de las circunstancias de la acción.
Para que un acto sea moralmente bueno se requiere a la vez que sea bueno en el objeto, en el fin y en las circunstancias. Nunca, un fin bueno jamás justificaría el uso de unos medios malos, porque el acto seria malo siempre; por consiguiente, no está permitido hacer un mal para obtener un bien.
No, intervienen también las pasiones, que son impulsos de la sensibilidad, y según dependan o no de la razón y de la voluntad, hay en las pasiones bien o mal moral.
La pregunta que se sigue es la siguiente: ¿qué es lo que hace a la voluntariedad imperfecta, reduciendo el carácter específicamente humano del acto y haciendo menos responsable a la persona de su actuar? Son cinco los principales modificadores de la responsabilidad de un acto humano:
Ignorancia, que afecta el conocimiento
Pasión, que afecta el consentimiento de la voluntad
Miedo, que opone a la voluntad un deseo contrario
Fuerza, empleo real de compulsión
Hábito, una tendencia adquirida por repetición

Ignorancia
La falta de conocimiento se da en diversos grados, una persona capaz de conocimiento podrá tener o no la obligación de tenerlo, por ejemplo un capitán de barco o un médico no necesitan saber música o arqueología; semejante ignorancia meramente negativa no tiene trascendencia ética.
En cuanto a la culpabilidad de la ignorancia vencible, esta dependerá de la cantidad de esfuerzo dedicado a superarla, y la cantidad del esfuerzo que se requiere también depende de la importancia de la cuestión y de la obligación que se tenga de poseer dicho conocimiento.
La ignorancia vencible no destruye la responsabilidad, pero la disminuye. La persona sabe que es ignorante y que puede obtener el conocimiento. Dejando deliberadamente de realizar el esfuerzo suficiente permanece en la ignorancia, pero los efectos que se siguen de su ignorancia son voluntarios en cuanto a causa, porque son una consecuencia prevista. El caso de un cirujano que consciente de no poseer conocimientos suficientes para una operación difícil la lleva a cabo de todos modos y mata al paciente; aunque no quería que el paciente muriera, es evidente que lo expuso deliberadamente a un peligro grave e innecesario, siendo responsable, por consiguiente de la muerte.
Pasión
Se entiende como pasión un movimiento muy fuerte del apetito sensible, los términos clásicos utilizados por diferentes autores son deseo y concupiscencia pero parece más apropiada la palabra pasión.
Las pasiones podrán surgir espontáneamente antes de que la voluntad haya actuado, cuando un objeto es presentado a los sentidos el apetito sensible reacciona casi automáticamente mediante sentimientos repentinos de alegría, enojo, odio, congoja, vergüenza, compasión, disgusto y otros por el estilo, cuando estas emociones se experimentan muy fuertemente es lo que entendemos por pasiones.
Un estado de pasión deliberadamente provocado o fomentado es voluntario en sí mismo. Por consiguiente el acto que resulta de la pasión es voluntario, ya sea en sí mismo o en su causa. Por ejemplo un individuo que cavila intencionadamente sobre un insulto, con objeto de realizar un acto de venganza, se sirve de la pasión como medio y de la venganza como fin, siendo tanto la venganza como su pasión voluntarias en sí mismas.
Miedo
El miedo es la aprehensión de un mal inminente. Puede ser una emoción y en este sentido el miedo es una de las pasiones y sigue las reglas de cómo la voluntariedad del acto se ve influenciada por la pasión. Pero existe también el miedo intelectual, este consiste en la comprensión de una amenaza de mal y ante éste una respuesta de la voluntad para evitar dicho mal mediante acciones racionalmente concebidas, esta clase de miedo puede o no estar acompañado de algún componente emocional.
Los actos realizados bajo coacción e intimidación tienen el miedo como motivo. Estos actos son extorsionados bajo la amenaza de males que serán inflingidos por otra voluntad humana sin embargo los actos realizados bajo coacción e intimidación son actos responsables, porque la persona pudo haber resistido y aceptado las consecuencias.
Fuerza
La fuerza es el poder físico externo que hace que alguien realice algo contra su voluntad. En el lenguaje común, el que cede a una amenaza de violencia se dice que se vio forzado, aunque no se trate, en realidad, de fuerza, sino de miedo y la voluntariedad de la persona ha de juzgarse de acuerdo con las normas del miedo.
La fuerza afecta solamente los actos externos y no el acto interno de la voluntad, en donde radica la voluntariedad del acto humano, se puede seguir queriendo lo opuesto, por muy violentamente que se vea forzado alguien a realizar un acto.
Hábitos
Se puede definir el hábito como una forma constante de actuar obtenida mediante repetición del mismo acto. Una vez adquirido el hábito, los actos resultan de él en forma espontánea y casi automática, de modo deliberación se hace innecesaria.
Si una persona se propone adquirir un hábito deliberadamente el hábito es voluntario en sí mismo, y los actos que de él resultan son voluntarios en sí mismos; si es que se ejecutan con la intención de adquirir hábito, pueden ser también voluntarios en cuanto a su causa si no son intencionados pero si consecuencias previstas del hábito.
Se puede descubrir que se ha adquirido un hábito inintencionadamente, ya sea porque no se tuvo conciencia de que se había ejecutado la misma acción tan a menudo, o porque no se tuvo conciencia que determinados actos eran formadores de hábito.
En general, Santo Tomás y los escolásticos consideran únicamente como humanos aquellos actos libres y deliberados de la voluntad. Su punto de vista se basa en el análisis psicológico. Un acto libre es voluntario, es decir, que proviene de la voluntad del individuo hacia el fin buscado o, en otras palabras, es aquel que es desarrollado por la voluntad ante la bondad que según el entendimiento, tiene el objeto que se le presenta.
Los actos libres, además, aunque no se deseen, provienen, intrínseca o extrínsecamente, de la propia determinación de la voluntad. Son aquellos actos que la voluntad puede o no producir, aunque todas las condiciones del libre albedrío estén presentes para llevarlos a cabo. Por lo tanto, son aquellos actos hacia los cuales la voluntad no se decide ni por el objeto ni tampoco por la disposición que tenga en ese momento el temperamento, ni tampoco por los hábitos, sino que es determinado por las condiciones propias de sí misma
Con frecuencia se invocan las buenas intenciones para justificar una acción objetivamente mala. Hay que notar que estas intenciones no sólo no vuelven bueno un acto intrínsecamente malo, sino que no son la verdadera intención que informa el acto. ¿Por qué? Porque, no es fácil discernir cuál es esta intención, y en cualquier caso ésta no puede considerarse al margen de la intención vocacional y de las virtudes. Cuando no se hace así, muchas veces estas intenciones no son más que justificaciones.

SOCIALES 8°




PERIODO

EJE O FACTOR ARTICULADOR
ESTÁNDAR(ES)
SUBPROCESO
DERECHOS BASICOS DE APRENDIAJE (DBA)

COMPETENCIA
(RELACIÓN ENTRE  PROCESO DE PENSAMIENTO  Y CONTENIDOS)
I
Relaciones espaciales y ambientale
Reconozco y analizo la interacción permanente entre el espacio geográfico y el ser humano y evalúo críticamente los avances y limitaciones de esta relación.
Comparo las causas de algunas olas de migración y desplazamiento humano en nuestro territorio a lo largo del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX (colonización antioqueña, urbanización del país...).
DB N°2: Comprende el fenómeno de las migraciones en distintas partes del mundo y cómo afectan a las dinámicas de los países receptores y a países de origen.
.
Utiliza mapas, cuadros, tablas, gráficas y cálculos estadísticos para analizar información sobre los comportamientos demográficos en Colombia y el Mundo.
Describe las principales características, causas y consecuencias de los diversos movimientos migratorios en Colombia y el Mundo.

martes, 29 de enero de 2019

EPISTEMOLOGÍA

El investigador es un individuo dotado de por lo menos dos virtudes importantes: una es la capacidad crítica, es decir una especie de astucia o capacidad para conseguir errores, para detectar problemas, para ver contradicciones y una segunda virtud es la curiosidad”
José Padrón Guillén

EPISTEMOLOGÍA

 

martes, 13 de noviembre de 2018

HABILITACIÓN DE FILOSOFÍA GRADOS DECIMOS

HABILITACIÓN DE FILOSOFÍA

DÍA: 26 DE NOVIEMBRE
HORA: 8:00 A.M.
SALÓN: 34

PUNTUALIDAD


TEMAS 
1° PERIODO COSMOLOGIA
2° PERIODO ANTROPOLOGÍA

4° PERIODO TEORÍA DEL CONOCIMIENTO / EPISTEMOLOGÍA 

NIVELACIÓN 4° PERIODO FILOSOFÍA

APRECIADOS JÓVENES DE GRADO DÉCIMO.

NIVELACIÓN DE FILOSOFÍA 4° PERIODO
DÍA: 14 DE NOVIEMBRE
HORA: 6:00 A.M.
SALÓN: 34

PUNTUALIDAD

TEMA
DOCUMENTOS TRABAJADOS EN CLASE 

miércoles, 19 de septiembre de 2018

Apreciados estudiantes el día 20 de septiembre tendremos la reunión con padres de familia para la salida pedagogica.
Puntualidad y llevar los permisos.

Salón 34
Hora 8:00am

viernes, 10 de agosto de 2018

SALIDA PEDAGÓGICA

Apreciados Jóvenes de grado 10, se encuentra aprobada la Visita Pedagógica, en el cual se encuentra la visita al Museo ETNOGRAFICO Y ANTROPOLÓGICO, en la localidad de de Guane, el recorrido por el poblado de Barichara, el Museo de de Historia en el Socorro, el parque gallineral en San Gil, y el día de mercado en Curiti.



jueves, 14 de junio de 2018

PLAN DE APOYO GRADOS DECIMOS FILOSOFÍA

PARA LOS GRADOS DECIMO

1. EL PLAN DE APOYO CONSISTE EN RETOMAR LOS TEMAS DESARROLLADOS EN CLASE, AL IGUAL QUE LOS QUISES, TRABAJOS Y EVALUACIONES PARA PRESENTAR UNA SUSTENTACIÓN.

2. FECHA DE LA NIVELACIÓN (sustentación escrita): en el horario de clase a partir del día 25-26-27 DE Julio/2018

PLAN DE APOYO GRADO 7° NIVELACIÓN SOCIALES

Para los estudiantes de grado Séptimo 07 y Séptimo 08

1. EL PLAN DE APOYO CONSISTE EN RETOMAR LOS TEMAS DESARROLLADOS EN CLASE, AL IGUAL QUE LOS QUISES, TRABAJOS Y EVALUACIONES PARA LA SUSTENTACIÓN.

2. FECHA DE LA NIVELACIÓN (sustentación escrita): 30 DE JULIO/2018



domingo, 10 de junio de 2018

3 PERIODO DE FILOSOFÍA

Apreciados jóvenes de grado décimo, para el 3 periodo de la asignatura de acuerdo al plan de área el tema es la Ontología. La información y el taller es para que lo organicen durante las semanas del 09 al 23 de julio/2018.

LA ONTOLOGIA O METAFÍSICA


INTRODUCCIÓN
La metafísica se centra en la naturaleza de la realidad última, este estudio se divide en Ontología, que es el estudio de los principios que componen el universo, y de la metafísica propiamente hablando, que estudia los rasgos generales de la realidad. La metafísica permite realizar un análisis acerca del ser y su trascendencia, a través de la realidad, al principio estas cuestiones se dieron respecto al cosmos y el principio del arjé, pero luego fue evolucionando hacia el hombre y su papel como ser en el entorno que le rodea.
La metafísica como ciencia siempre ha sido un punto fuerte de discusión para los filósofos, ya que es difícil establecer un principio que explique porque el hombre es ser, vivo, pensante y mucho más tratar de otorgar un método que asista en la carrera continua del hombre para ser mejor, es decir que permita que las capacidades especiales que reconocen al hombre como algo especial se desarrollen completamente y permitan llegar al ser. La metafísica es importante en las “ciencias” de la filosofía, pues define al hombre como hombre y lo reconoce como un ser superior que trasciende.


  • OBJETIVOS



  • OBJETIVO GENERAL

  • Identificar las características de la metafísica en la filosofía a través de la historia


  • OBJETIVOS ESPECIFICOS

  • -Reconocer la importancia de la metafísica como ciencia del ser
    -Comprender las características de la metafísica en cada una de las épocas de la filosofía
    - Explicar cuales fueron los principales filósofos de cada época y en que consistían sus puntos de vista


  • VOCABULARIO

  • APEIRÓN: El principio de todas las cosas según Anaximandro, es una sustancia intangible, invisible e infinita.
    DEMIURGO: Es el responsable último de la creación del universo material, que atrapa la esencia divina de la humanidad.
    DEVENIR: Realidad entendida como proceso de cambio, proceso mediante el cual algo se hace o llega a ser.
    DOGMA: Punto capital de un sistema, filosofía o religión que es proclamado cierto e innegable
    METAFÍSICA: Disciplina filosófica que trata de la esencia de la realidad total y entraña una concepción total de la vida y del universo.
    SER: esencia o naturaleza, ente
    SUSTANCIA: Lo que hay de permanente en un ser, a lo cual son inherentes las cualidades estados y actividades perceptibles
    RACIONALISMO: Doctrina epistemológica, opuesta al empirismo que considera a la razón como fuente principal y única del conocimiento humano en general.
    REALISMO: Afirma la existencia de objetos reales independientes de la conciencia y asequibles a nuestras capacidades cognoscitivas.


  • ONTOLOGÍA Y METAFÍSICA

  • La metafísica es la filosofía primera según Aristóteles, fue llamada así por el filósofo peripatético griego Andrónico de Rodas en el siglo I a. C. (año 70 a. C.), cuando recopilo los 14 libros de Aristóteles que estaban “más allá de la física”. Esta palabra a adquirido un carácter que la hace referirse a cosas que trascienden la realidad humana, que no pueden ser explicadas por leyes o causas. Al contrario, para la filosofía la palabra se refiere a todo lo que es la realidad. El nombre más reciente que se le ha dado es el de ontología (óntos-lógos, ciencia o tratado del ente, o idea del ser), fue utilizado por primera vez por Johannes Clauberg (1974), se popularizo en el siglo XVII y en el siglo XVIII con Christian Wolf. Tanto así los dos nombre pasaron a se sinónimos, aunque en la filosofía contemporánea tienen significados ligeramente distintos aunque ambos sean derivados de la ciencia Metafísica.
    La diferencia entre la metafísica y la ontología esta en que la primera investiga los principios de la realidad, y como esta realidad es en todos los universos, esta adquiere un carácter más general y abstracto. La ontología en cambio, estudia las divisiones ultimas de este universo, porque lo que se centra más en la parte física de la modo humano. La ontología o metafísica tuvo origen es las preguntas acerca del hombre por parte de los griegos y al igual que la metafísica fue adquiriendo matices distintos en las diversas épocas históricas.


  • ONTOLOGÍA GRIEGA

  • Los primeros paradigmas fueron la pregunta por el cosmos, es decir comprender el principio del arjé ( de donde nacen las cosas y a adonde revierten cuando mueren), y el de esta totalidad que nace y muere a la cual denominaron Physis (naturaleza). Estas preguntas fueron planteadas por los presocráticos a quien Aristóteles denomino “fisiólogos”. La pregunta sobre ¿Que es lo que es?, brota del principio del Physis, las sustancias que tienen un ciclo y que son el modo primerísimo del ser y conforman esta naturaleza. A su vez el Arjé es el principio generador de la Physis de donde vienen y a donde llegan esas sustancias, donde las cosas se reducen a él aunque él no se reduzca a ninguna. Respecto al arjé se dieron distintas propuestas, de las cuales se distinguen dos clases; los principios físicos, como principio que son elementos materiales, de la naturaleza , y los principios lógicos, cuando el arjé era indeterminado, un producto del pensamiento, es decir, no era natural ni material.
    Tales y Anaxímides, destacaron cada uno con el agua y el aire como el arjé. Después surgió el Apeirón, planteado por Anaximandro, que contenía toda causa de nacimiento y destrucción del mundo, pero el mismo era inmutable. También esta el ser como principio, que fue planteado por Parmenides de Elea quien lo explico como el ente que constituía todas las cosas y les daba su existencia, pero es perceptible nada más que por la razón. Este ser es lo permanente e inmóvil que puede ser captado por nuestra razón, a diferencia de la realidad o el devenir que es captada por los sentidos y es la apariencia mudable y cambiante de este.
    Platón en cambio dividió la realidad en dos esferas; la esfera o mundo inteligible, de las ideas o formas perfectas, eternas o indivisibles y el mundo sensible, es decir el devenir, lo material y lo conocido a través de los sentidos. Para platón la verdadera y necesaria realidad se encontraba en el mundo de las ideas, pues no esta sujeto a cambios ni a corrupción, sino que están descritas siempre sin contradicciones, el mundo real era en cambio sombrío y cambiante a los sentidos, son la sombra de las ideas. Para ejemplificar esto Platón expuso el mito de la caverna, en el cual muestra a la humanidad prisionera de una caverna que confunde las sombras proyectadas en una sombra con la realidad y considera al filosofo como una persona que penetra el universo fuera de la caverna de la ignorancia y alcanza una visión de la verdadera realidad, el mundo de las ideas. Sin embargo existe aún un problema pues era difícil separar las cosas de las ideas ya que estas eran las causantes de las otras, esta cuestión fue tratada de resolver con la postulación del Demiurgo, un ser creador que relacionaba los dos mundos, sin embargo esta respuesta no fue totalmente satisfactoria por lo que Aristóteles presento otra en el que el ser es Sustancia. Esta sustancia es una combinación entre potencia y acto, entre aquello que puede ser (pero todavía no es) y aquello que ya es (también conocido como materia y forma). Las cosas eran un compuesto de materia y forma, y lo que distinguía una cosa de otra eran los accidentes que caracterizaban su forma. Estos eran percibidos por los sentidos pero no eran estos la sustancia sino solo la diferencia.


  • ONTOLOGÍA MEDIEVAL

  • La época medieval se caracterizo por el surgimiento de filósofos cristianos, quienes intentaron acomodar la idea de la Physis a la de Dios. Es decir que para ellos la physis es la creación. La doctrina cristiana se constituyo por dos dogmas principales, el dogma trinitario, en el cual en Dios hay una sola sustancia en tres personas distintas y el dogma cristológico, que distingue una sola persona, Cristo, como hombre y Dios perfecto, unión de las dos naturalezas divina y humana.
    En esta época se tomaron las mismas categorías metafísica griegas y se adecuaron al cristianismo, por lo que es criticada por ser una época oscura para la filosofía sin embargo, respecto a esto Zubiri escribe
    El cristianismo tiene una idea del mundo distinta ala de los griegos. La idea de mundo fue uno de los más importantes puntos de encuentro del cristianismo con la filosofía, y lo que forzó a los pensadores cristianos a elaborar un pensamiento filosófico propio, Puede decirse que originariamente toda la radical innovación que el cristianismo introduce en la filosofía es una nueva idea del mundo. Mientras los metafísicos cristianos, salvo en puntos concretos, absorben, depuran y elevan la metafísica griega, en cambio rompen con esta por su idea del mundo. Y ante todo por la raíz de este: el mundo esta “creado”. Este es su carácter último y para muchos pensadores un carácter formal e intrínseco del mundo en ciato tal. Mundo es entonces la totalidad del ente creado qua creado. Con ello, la metafísica se convierte en teoría de la creación”.
    Para los escolásticos medievales el objeto propio de la metafísica fue un motivo de gran preocupación y se ocuparon en gran medida de las relaciones entre la metafísica y la teología. Agustín de Hipona reconcilia el pensamiento platónico con el dogma cristiano, esta obra se resume en la sentencia de “cree para entender”, pues la verdad buscada por la filosofía era Dios, y su acción intelectual quien es Cristo. En ontología San Agustín identifico a Dios con Ser, por ser el la identidad, la esencia. Dios es para el la inteligencia que contiene las ideas de las cosas del mundo sensible, esto significa que todas las cosas son obra e inspiración del El.
    En esta época se manifestó el problema de los universales, que es la pregunta sobre el tipo y el conjunto de todo aquello que se asume como existente, es el nombre que se le da a un conjunto de cosas que comparten alguna característica, por ejemplo Hombre (cuando no referimos a todos los hombres), caballos, libros, etc. El problema surge cuando no se sabe real la existencia de estos términos. Boecio expreso especto a esto que lo universal no podía ser sustancia, pues esta es singular (las cosas son singulares), y que lo universal era inmaterial y existía unido y confuso a los accidentes de las cosas (las cosas son universales , sin embargo esta proposición resultaba problemática para los filósofos a la hora de explicar la Trinidad la unidad de tres sustancias en una sola.
    En la época medieval cabe destacar dos corrientes contrarias, el realismo y el normalismo, que intentaban dar respuesta a la pregunta sobre los universales. Los realistas pensaban que lo universal existe como una sola cosa, y que la existencia de las cosas estaba premeditada por la existencia de los universales. El más importante realista fue Santo Tomás de Aquino. El describió la metafísica como “la ciencia de la verdad, no de cualquier verdad, sino de aquella verdad que es el origen de toda la verdad, esto es, que pertenece al primer principio por el cual las cosas son. La verdad que pertenece a tal principio es, evidentemente, la fuente de toda la verdad” (Contra Gent., I, 1,2). Esto da como resultado que Dios sea el objeto de la metafísica y a la vez sea el estudio de el ser o el ente, lo que da a pensar en una subordinación ante la teología por parte de la física, que es justificada por Santo Tomás por un acuerdo fundamental entre estos dos que dan como resultado la metafísica. Para Santo Tomás el propósito de la metafísica era el conocimiento de Dios a través de los seres finitos sensibles.
    Los nominalistas, al contrario, consideraban los universales como irreales y abstracciones del pensamiento, pues para ellos pensar en la realidad de los universales era limitar la inteligencia y el poder de Dios.
    El principal nominalista fue Guillermo de Ockham, quien considero a los universales como meros instrumentos del lenguaje que tomaban el lugar de las cosa cuando se hablaba de ellas. Lo universal eran simples términos para designar las cosas.


  • ONTOLOGÍA MODERNA

  • Los filósofos modernos fueron muy influidos por los avances de la ciencia experimental y la matemática, por lo que intentaron desarrollar ideas que concordaran con esos conocimientos. Esta búsqueda planteo la postulación del sujeto cognoscente, como el fundamento de la realidad.
    El conocimiento de la metafísica en la época moderna se caracterizo por ser a priori es decir, que deriva solo de la razón, para que se diferenciara del conocimiento a posteriori, que lo hace solo de la experiencia.
    Con Descartes se inicia este periodo y se inaugura la subjetividad, que planteaba la necesidad de postular un principio de verdad para postular una verdad. El yo-pienso, se convierte en el primer principio indudable de la nueva filosofía. La metafísica dará en teórica critica del conocimiento, y la ontología no tratará el ser, sino de la idea del ser.
    El racionalismo será la primera corriente filosófica que se desarrollara en este siglo, y a su vez esta desencadenara otras corrientes que serán muy importantes en el pensamiento moderno y que culminaran con el pensamiento de Kant, Hegel y Comte. Este trata acerca del conocimiento a priori, principios derivados del conocimiento de la razón. Se subdividirá en el monismo y en el dualismo. El monismo será una corriente que creía que solo existía una sustancia básica, el “monismo idealista” sostenido por el irlandés George Berkeley decía que la sustancia es mental; el “monismo materialista” aseguraba que solo es física, y era seguido por el inglés Tomas Hobbes, y el “monismo neutro” afirmaba que la materia no es ni solo mental ni solo física, y era seguido por el holandés Baruch Spinoza. Este último filósofo expuso una visión panteísta de la realidad en la que el universo es similar a Dios y cada cosa lo contiene a Él.
    El dualismo será la corriente liderada por Descartes, según el cual el cuerpo y el alma son unidades diferentes (substancialmente unidas en el hombre) y constituyen las únicas sustancias del universo. Para Descartes, la metafísica es una prima philosophia, que trata de cuestiones de ka existencia de Dios y la distinción real entre el alma y el cuerpo del hombre.
    Todas las corrientes racionalistas creían que la realidad es de carácter racional y que el criterio para llegar a la verdad estaba en la conciencia.
    La corriente contraria al racionalismo se llamo empirismo, esta consideraba los sentidos como el criterio más adecuado para llegar a la verdad. Según esta, son las sensaciones las que componen las ideas y por lo tanto la realidad solo e perceptible mediante los sentidos. Estas doctrinas se derivan del conocimiento a posteriori, para la cual este no es una representación de la realidad sino solo un reflejo de las percepciones humanas. Para los empiristas, toda especulación que no derivara de la experiencia era un sinsentido u por lo tanto la metafísica tradicional no aportaba ningún contenido real. De esta corriente se destacan David Hume, John Locke y George Berkeley.
    De esta época al principio de la modernidad, muchos autores rechazaron a la metafísica como ciencia por ser una realidad trascendente, y que contrariaba los principios de realidad objetiva que caracterizaban la época. Se destaca el caso de Hume, quien dijo que todo conocimiento en conocimiento de hechos o de relaciones de ideas deja sin base el conocimiento de cualquier objeto metafísico y que por lo tanto la metafísica no existe. Augusto Comte. También escribió: “La metafísica, como la teología, trata sobre todo de explicar la naturaleza íntima de los seres, del origen destino de las cosa..., pero en lugar de operar con los agentes sobrenaturales propiamente dichos, los reemplaza cada vez más por esas entidades o abstracciones personificadas, cuyo cuso verdaderamente característico a permitido designarla con el nombre de ontología”
    Estas corrientes derivaron en Kant, quien creo una filosofía crítica distinta llamada “trascendentalismo”. Su obra es agnóstica pues niega la posibilidad de un conocimiento estricto de la realidad última, es empírica pues afirma que el conocimiento deriva de los sentidos y es racionalista pues mantiene el carácter a priori en estos principios empiristas. El sin embargo distingue otro propósito distinto al de estas vías filosóficas; definir los límites del conocimiento humano o encontrar las condiciones de la posibilidad de conocimiento en general. Inmanuel Kant trata de negar la metafísica para “fundarla” ante la crítica, y demuestra que no hay posibilidad de juicios sintéticos antes de la experiencia en metafísica. Por este punto la metafísica se convierte de una ciencia teórica, a una razón practica, en la cual es más una realidad moral que una ciencia. Para Kant los conocimientos de la razón son necesarios para aplicarlos a la experiencia, ya que solo en esta se manifiestan, así ya sean anteriores. Para el de las cosas solo podemos conocer sus impresiones en cada uno de nosotros, a esto es lo que llamó fenómeno. Esto es lo que nuestra cabeza descubre a partir de la experiencia que no son sino datos o intuiciones del ser. La lógica de estos racionamientos es la que hace a la experiencia trascendental, tanto a la real como a la posible. Lo que Kant quería demostrar es que el conocimiento solo era alcanzable en los terrenos de la experiencia, y que por lo tanto la razón estaba delimitada por esta; el error estaba en que la razón fuera tomada como las ideas constitutivas de las cosas, cuando no eran más que ideas regulativas. La metafísica debía tener un “uso”, servir para la vida practica, para la moral. Las ideas no debían dar razón de la existencia; si más bien regular el conocimiento humano. La filosofía a partir de esto empezó a conocerse como epistemología. Kant también intento reconciliar ciencia y religión, realizando una critica desde la lógica, para llegar a un mundo de dos niveles; este mundo incluye los moumena, objetos concebidos por la razón pero no percibidos por los sentidos, y los phenomena, las cosas tal y como aparecen en los sentidos y que son accesibles al estudio material. En este orden, Dios, la libertad y la inmortalidad humana son para Kant son realidades moumenales que se asimilan a través de la fe moral y no del conocimiento científico.
    En el siglo XIX los críticos del kantismo tomaron dos vías opuestas respecto a la metafísica, que revivieron el problema del ser; el idealismo y el positivismo.
    El idealismo negó la crítica de Kant en sus explicaciones a la metafísica trascendental y rechazaron el concepto de las cosas en-sí-mismas, este movimiento fue liderado por Wilhelm Friedrich Hegel, quien consideraba incorrecta la teoría de que la realidad última no puede ser entendida. También creía que los mayores logros del espíritu humano (ciencia, cultura, religión y estado) no son resultados de procesos mentales que se dan naturalmente sino que son concebidos y mantenidos por la dialéctica. Hegel consideraba al ser como devenir, un movimiento continuo del cual la razón pretendía explicar las estructuras lógicas. La realidad esta constituida por relaciones de negación. Para continuar en movimiento y cambiar de una cosa a otras, se debe renunciar a lo que se es anteriormente para conseguir ser algo distinto. La realidad, es el cambio de las cosas en la negación de unas con otras. El pensamiento es el único capas de reducir este problema para poder comprender las relaciones entre contrarios, por esto supera el devenir y se convierte en el ser mismo de la realidad, por lo que esta comienza a ser solo en el pensamiento. Hegel intenta construir una filosofía capaz de explicar la naturaleza y el hombre, el pasado y el futuro, toda la realidad de forma absolutamente completa. De el idealismo derivan otras teorías metafísicas, como el la época prekantiniana. Entre estas últimas teorías metafísicas sobresalen el empirismo radical o pragmatismo (modalidad metafísica expuesta en Estados Unidos por Charles Sanders Peirce, desarrollada por William James y adaptada como instrumentalismo por John Dewey), el voluntarismo (cuyos máximos representantes fueron el filósofo alemán Arthur Schopenhauer y el estadounidense Josiah Royce), el fenomenalismo (patente en los escritos del pensador francés Auguste Comte y del filósofo británico Herbert Spencer), la evolución emergente o evolución creativa (definida por el francés Henri Bergson) y la filosofía del organismo (elaborada por el matemático y filósofo británico Alfred North Whitehead.
    La otra corriente filosófica importante derivada de las ideas de Kant es el positivismo. Las ideas de Comte son contrarias a las de Hegel y expresan que lo único real y existente es lo que puede ser experimentado, medido y catalogado a través del método científico.

    Esto quiere decir que las preposiciones de la metafísica son verdaderas, pues no derivan de la experiencia. Según Comte, la metafísica es un modo de conocer propio de una época de la humanidad, donde las ilusiones de la razón que no tienen base en la realidad positiva, son rechazadas y olvidadas. La metafísica es un modo de conocer propio de una época de la humanidad, destinado a se superada por la época positivista.
    Durante la época moderan, la metafísica sufrió muchas diversificaciones de filosofías que la exaltaron y la humillaron, que la relevaron o que la tomaron como centro de su filosofía. Sin embargo, podemos llegar a la conclusión de que a pesar de esto la metafísica es y será uno de los temas más importantes de la filosofía, bien porque se considere el más importante, o bien porque se resista y se pretenda dejar de lado.


  • ONTOLOGIA CONTEMPORÁNEA

  • La negación de la metafísica en el siglo XIX representaba a veces la negación del saber filosófico, lo que resultaba una contrariedad y desemboco en que en el siglo XX surgieran corrientes que refutaran esto. Los principales contradictores fueron la filosofía analítica (principio de la verificación del significado), el existencialismo, el marxismo y el materialismo dialéctico.
    De la Ontología contemporánea se destacan tres autores; Nietzshe, Heidegger y Zubiri.
    Para Friedrich Nietzshe era necesario derrumbar una serie de supuestos que caracterizaban la filosofía occidental. El principal supuesto era la fábula del otro mundo, que concebía la metafísica como una explicación del ser como parte de otro mundo, explicación que venía desde Platón con su tesis acerca de un mundo de ideas inventada por la razón humana. Para Nietzshe los valores tradicionales (representados por el cristianismo) habían perdido su poder en las personas, a lo cual llamaba nihilismo pasivo. Expreso su idea en la cortante expresión de “Dios a muerto”. Para el Dios estaba justificado en la fábula del otro mundo, desde cuando Platón insto la idea del bien supremo, y esta idea había perdurado en la metafísica a través de la historia. Esta idea estaba representada en los valores tradicionales que enseñaban una “moralidad esclava”, una moralidad de personas débiles y resentidas que fomentaban comportamientos como la sumisión y el conformismo porque los valores incluidos en tales conductas servían a sus intereses. El representante principal de estos valores fue para él el cristianismo, llamado por Nietzshe un platonismo para el pueblo, y era necesario desaparecer esta fábula, para poder iniciar de nuevo con la cuestión primera que se habían planteado los griegos acerca de la Physis y retomar el camino que Platón abandono. Por esta razón, Nietzshe considero su filosofía como un platonismo al revés, pues frente a lo verdadero e inmutable el privilegiaba lo real, lo temporal, mudable e instintivo. La postulación del mundo físico o sensible como el mundo de lo que verdaderamente es. De esta derogación de los valores hacia un principio opuesto, nace la necesidad de crear nuevos valores que reemplazan los tradicionales y conforman a un superhombre. Este superhombre es distinto a las masas, que son como rebaño; en cambio el es independiente e individualista. Siente con intensidad, pero sus pasiones son refrenadas por la razón, vive la realidad, sin centrarse en las recompensas que promete la religión el afirma la vida. El superhombre es un modelo de la “eticidad maestra” que rechaza lo envilecido de la humanidad por la religión, excepto solo lo que es totalmente vital. Para Nietzshe todo acto o proyecto humano esta limitado por la voluntad de poder, no solo sobre otros, sino sobre uno mismo, algo que es necesario para la creatividad y que se manifiesta enteramente en su modelo de superhombre. A este concepto de superhombre se le critica su concepción de una sociedad de amos y esclavos y a menudo se le identifica con las filosofías autoritarias. Nietzshe quería responder la cuestión del inicio y composición de las cosas, dejando de lado el platonismo pero no alcanzo su propósito, ya que la locura lo sorprendió en el momento de empezar a elaborar la solución, sin embargo dejo planteado para la posteridad la cuestión de la vigencia de la metafísica.
    Martín Heidegger reformula al igual que Nietzshe la historia del la metafísica, pero atacando la subjetividad, la actitud elemental y manipuladora que privaba de sentido al ser y se convertía en un estado de nihilismo, que permitía a los filósofos modernos sobre valorar los alcances y probabilidades de la razón e intentar responder la pregunta de la realidad cuestionándose a sí mismos.
    Heidegger comenzó por preguntarse que es el ser y que clase de ser es, esto le llevo a establecer una relación entre el modo de ser de los objetos y de la humanidad, de la estructura del tiempo. Debe hacerse la pregunta acerca del sentido del ser , pues este es algo existente, que no esta fuera del mundo sino que se encuentra en el , como en la existencia humana se encuentra el hombre. Esto no quiere decir que la investigación sea subjetiva, sino que debe partir del hombre porque es el único ente abierto al ser. El individuo, sin embargo, esta en peligro de caer en la rutina, la cotidianidad, desde la cual el hombre es un ser arrojado al mundo y abierto a las cosas como a las demás existencias. En este espacio el hombre se da cuentas de que todas sus esperanzas y proyectos están limitados por la muerte, lo que lo lleva a pensar que su existencia esta destinada a ella y lo hace sentir un sentimiento de angustia, La angustia de reconocer que es un ser arrojado al mundo para morir en el. El hombre es un ser para la muerte, su vid esta fundada en la nada y la existir es solo sostenerse dentro de la nada. Para Heidegger, la filosofía debe reconocer que el hombre es un ente sin ninguna razón para existir. Por lo tanto, el ser que se ha concebido no es posible, pues se fundamenta en cosas que a su vez se fundamentan en la nada, como Dios o el sujeto cognoscente; concepciones de la subjetividad que no tienen sentido pues no reconocen que el hombre y su subjetividad son entes-para-la-muerte. Esto es lo que critica Heidegger a la metafísica, la estructura fundamental del ser que se descubre es el ser-en-el-mundo, el estar-en-el-mundo. Esto es una realidad total, en donde no solo esta el sujeto en el mundo, ni el mundo en el sujeto, ni el mundo como conjuntote cosas. El ser es una totalidad, un misterio, no porque este fuera de toda comprensión, sino porque no es comprensible a través de un solo fundamento o concepto. El seres solo presencia, es la existencia misma. Una existencia para la muerte que hay que afrontar para poder adquirir un autentico sentido del ser y de la libertad.
    La época que vivimos es una época sin metafísica, las ideas positivistas a moldeado nuestra cultura al punto de hacer desaparecer la ontología. La realidad no es asunto ya de la filosofía sino de las ciencias empíricas. Esto sin embargo fue promovido por la misma filosofía, que vio la metafísica muy complicada y se dedico a desentrañar los contenidos del lenguaje con la excusa de no caer en los errores de esta misma. Sin embargo, para algunos filósofos contemporáneos, el objetivo del positivismo acerca de vivir sin metafísica a sido catastrófico en el desarrollo de los sucesos de nuestra época, con el desatar de las guerras y los demás problemas actuales. Además de Heidegger, filósofos como Nicolai Hartmann, Edmund Husserl y Jean Paul Sastre, representan distintas visiones de la ontología, que coinciden en el rechazo de la filosofía centrada en las esencias, lo universal, y la preocupación por lo concreto y singular; y la utilización del análisis fenomenológico como base de la filosofía.
    Para Xavier Zubiri, el hombre es un “animal de realidades” que posee una “inteligencia sentiente”, su función consiste en acerca a la realidad de las cosas sintiéndolas, el hombre es un ser metafísico, abierto al mundo de lo real. El mundo real es lo primero inteligible y se da como ”realidad sentida” es decir que la expresión de la realidad es lo que sentimos; esta realidad es tratada desde el hombre desde distintos ángulos: El entorno, que es todas las cosas que lo rodean y lo que descubre por sus sentidos, este entorno es social, ecológico y técnico, y todos juntos son los que determinan el entorno vital del hombre; El medio, que son los elementos del entorno que el hombre utiliza para sus fines y objetivos, estos elementos son los medios de vida para el hombre. El mundo, que es la totalidad de lo real. El horizonte, el estímulo y el reto para el hombre, es el marco dentro del cual realizará su propia experiencia terrenal y elaborará su propio mundo. La situación, que se establece por la manera como el hombre esta en el mundo, su experiencia, su circunstancia, su situación general; y la Habitad, la manera como el hombre desafía su realidad, la forma como se enfrenta a las cosas.
    Es la inteligencia del hombre la que permite al hombre aprehender todas las cosas como reales, aprensión que el denomina logos y que le permiten sentirlas, pero no saber de que se tratan. Es la capacidad de razonamiento la que le permite pasar del entendimiento racional al conocimiento, mediante la razón se conoce de verdad lo que es la realidad y se alcanza el sentido de la existencia humana como ligada y abierta a la trascendencia.
    Esta metafísica planteada por Zubiri es una metafísica del hombre en relación con lo otro, con el otro, es una metafísica de la alteridad en la cual el hombre es un ser personal social moral cultural que crea su mundo dentro del conocimiento de su realidad.
    5. CONCLUSIONES
    La ontología (o metafísica) a sufrido diversas metamorfosis en su manera de ser vista a través de la historia y de cada una de las épocas podemos sacar una conclusión que resume su pensamiento, de los cuales podemos decir:
    • La ontología griega juzgaba al ser como una composición de cuerpo y alma, y de cada una de estas partes los distintos filósofos griegos plantearon distintas hipótesis, se destacaron la definición de Platón, que decía que las ideas eran verdadero ser y que lo material era solo la cárcel de estas, y Aristóteles, que decía que el ser era una sustancia compuesta por alma y cuerpo.
    • La ontología medieval consideraba al ser como Dios, que era el ser supremo de toda la creación y a quien el hombre debe fidelidad y obediencia, en esta época se destacaron San Agustín con el realismo y Santo Tomás con el normalismo.
    • La ontología moderna se destaca por la influencia que tuvo en ella las ciencias y los conocimientos empíricos, la metafísica será tratada después de la razón y no será tan importante el que es el ser sino más bien cual es la idea del ser. De esta época se destacan muchos filósofos pero el más importante en la metafísica será Inmanuel Kant con sus ideas acerca del ser libre.

    La ontología contemporánea abra casi desaparecido pues se considera que la metafísica por tratar asuntos que son trascendentes y subjetivos no se puede estudiar y saber cual es su esencia en verdad, sin embargo se destacan autores como Hediegger, Nietszhe y Zubiri, cada cual tratando de ver al ser como parte del racionamiento humano y como ser existente que posee una razón para existir, así sea solo ser arrojado al mundo para morir.

    TALLER
    Después de leer y ver los vídeos relacionados con la Ontologia, desarrolla el siguiente compromiso:

    1. En un ensayo de 4 cuartillas, define que es la Ontologia y Metafísica, sus épocas y  que relación existe entre las dos. Realizar en físico para entregarlo a mano.

    2. El curso deberá dividirse en dos grupos ( la primera mitad del la lista y la segunda mitad de la lista) y presentaran una miniobra teatral del Mito de las Cavernas con su parlamento, vestuario, escenografía,  etc e interpretar el significado de la obra de Platón.
    La otra mitad del grupo presentara la interpretación del Mito de las Cavernas pero la que se presenta en la película de matrix.

    3. Se hará el examen escrito de la temática de la Ontologia al finalizar.

    Tomado de http://filosofiadedecimoabcde.blogspot.com/2012/04/la-ontologia-o-metafisica.html

    3 PERIODO FILOSOFÍA GRADO 10°


    LA ONTOLOGÍA 


    La metafísica se centra en la naturaleza de la realidad última, este estudio se divide en Ontología, que es el estudio de los principios que componen el universo, y de la metafísica propiamente hablando, que estudia los rasgos generales de la realidad. La metafísica permite realizar un análisis acerca del ser y su trascendencia, a través de la realidad, al principio estas cuestiones se dieron respecto al cosmos y el principio del arjé, pero luego fue evolucionando hacia el hombre y su papel como ser en el entorno que le rodea.

    La metafísica como ciencia siempre ha sido un punto fuerte de discusión para los filósofos, ya que es difícil establecer un principio que explique porque el hombre es ser, vivo, pensante y mucho más tratar de otorgar un método que asista en la carrera continua del hombre para ser mejor, es decir que permita que las capacidades especiales que reconocen al hombre como algo especial se desarrollen completamente y permitan llegar al ser. La metafísica es importante en las “ciencias” de la filosofía, pues define al hombre como hombre y lo reconoce como un ser superior que trasciende.